Ayer por la la noche se realizó el primer encuentro en conjunto entre todas las organizaciones invitadas al Seminario, tanto brasileras como hispanoamericanas. La diferencia de idiomas no fue un impedimento para que el mensaje de la Unidad y Fraternidad hiciese vibrar a todos los participantes.
Hasta el momento los miembros de las distintas organizaciones de Brasil habían participado de dinámicas grupales por su cuenta, dirigidos por Uniredes. A su vez, las organizaciones de todos los países de habla hispana asistieron a los encuentros dirigidos por Suma Fraternidad.
Pero a la noche esta escisión se quebró para unir a todos en una misma voz y a partir de mañana todas las charlas ya se realizarán en conjunto.
El alegre encuentro nocturno contó con dinámicas de juego para que los participantes se conozcan mejor entre sí. Hubo una sesión de Origami donde se representó en un barco los temblores y vaivenes que a veces sufre una organización social, que puede reponerse de cualquier tormenta si trabaja en equipo y tiene puesta “la camiseta”. Luego todos los participantes resumieron en UNA palabra aquello que los impulsaba a seguir en el camino del servicio. “AMOR, FE, ESPERANZA, IGUALDAD, FRATERNIDAD” fueron trazadas con marcadores de colores sobre las camisetas de papel, que pegadas sobre la pared reflejaban que bajo todas estas distintas nacionalidades vibraba un único sueño.
Para finalizar la jornada compartieron sus palabras los anfitriones de la sede, Mariela y Diviol Rufino: “La Mariápolis Ginetta está vibrando con la presencia de ustedes. Esta reunión está cumpliendo el sueño de muchas generaciones.”
El encuentro terminó con la emocionante canción de Mercedes Sosa que implora con toda la magnitud de su voz: “Latinoamérica libera tu grito de unión y libertad”.